Policía y cajera de hipermercado terminaron en la cárcel por maniobras delictivas con etiquetas
CIUDAD DE LA COSTA (1298) Un oficial de policía y la cajera de un hipermercado de Canelones adulteraban códigos de barras y se repartían el dinero mal habido. Un subcomisario de la seccional novena de Montevideo, de 39 años, y una joven de 20, se asociaron para delinquir.
El modus operandi es novedoso -según informa el portal http://CausaAbierta.blogia.com ya que la chica trabajaba en un hipermercado como cajera y cada vez que el oficial de policía aparecía por su caja le entregaba el pedido y cobraba con total naturalidad.
Las cámaras de seguridad del establecimiento detectaron que el habitual cliente realizaba movimientos extraños cuando se encontraba en distintas góndolas, pero no acertaban a ver qué hacía exactamente.
En virtud de que se sospechaba que se estaba frente a una maniobra delictiva, solicitaron los servicios la seccional 18a. (Shangrila - Canelones) y se dispuso la vigilancia del caso.
Los agentes -encubiertos como clientes, entre ellos una mujer- lograron acercarse al hombre y observar lo que hacía.
Los policias de la seccional 18 no sabían que el vigilado se trataba de un colega de la fuerza policial, pero vieron como sacaba los códigos de barra de los productos y rapidamente les pegaba otro, lógicamente de menor precio.
Cuando los agentes se identificaron y procedieron a la detención del infiel subcomisario, éste intentó imponer su jerarquía.
Igualmente se procedió y marchó preso junto a la joven cómplice, siendo puestos ambos a disposicion de la Juez de la Ciudad de la Costa, la que decretó procesamiento para ambos por el delito continuado de estafa.
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SIN PIEDAD -