El Asesor en Prevención de Accidentes del Centro Avanzado de Capacitación y Entrenamiento para actuación ante emergencias, sitio www.inspectoralbornoz.com, dirigido por el Inspector de Policía - Bomberos (r) Reinaldo Albornoz propone hablar de incendios ahora, que estamos en invierno. En ese sentido Edgardo R. Menéndez, Teniente Coronel(Aviador) retirado de la Fuerza Aérea Uruguaya, Asesor del Centro Avanzado de Capacitación y Entrenamiento para actuación ante emergencias adelanta que "la Prevención de Accidentes en general, y en nuestro caso - los Incendios, -como dice un viejo adagio-, no por eso menos cierto: os accidentes (incendios) no suceden porque sí; son ocasionados". Se pueden evitar” Señala que “además de un ambiente seguro y libre de riesgos, la capacitación, el entrenamiento adecuado, y una supervisión cuidadosa del personal, son esenciales para que las operaciones y actividades sean libres de accidentes. O sea que los incendios que se pueden prevenir si afectan seriamente la capacidad de una empresa ya sea por medio de lesiones al personal y daños al equipos y el material, éstas líneas que en lo sucesivo intentaremos de compartir, servirá como una fuente conveniente de información práctica y como guía para todos en general en la prevención de incendios y en el manejo de equipo y materiales potencialmente peligrosos para diferentes operaciones y así eliminar las causas de los siniestros”. Todas las personas, especialmente los supervisores y capataces, podrán utilizar estos conceptos para planear, organizar y poner en funcionamiento los diferentes aspectos de un programa de seguridad y para ayudarse en la orientación de actividades para la prevención de incendios, adoctrinar a los hombres en la prescripción de prácticas de seguridad y en la prevención de los mismos. Las normas de seguridad y los fundamentos para la prevención que eventualmente se emitan, podrán utilizarse también, como requisitos mínimos para cubrir las condiciones promedio pertinentes a casi todas las actividades. Aunque está de más decir que no es factible cubrir todas las situaciones que pudieran presentarse, por consiguiente, se necesitará de la motivación y cooperación decidida, y los recursos e ingenio particular de cada uno o en forma colectiva de toda la gente para hacerle frente a las condiciones y actos no comprendidos en estos artículos. Además, quienes utilicen esta información deberá reforzar cualquier recomendación con la lectura y el apoyo a la implementación de leyes, normativas, reglamentos, manuales, directivas, fichas tácticas y otras publicaciones similares. Los folletos, libros y boletines publicados por otras empresas, agencias y organizaciones también serán útiles y deberán ser consultadas. En tal sentido, la persona de más alta jerarquía de una empresa será la responsable de la ejecución de los Programas de Seguridad. Sus representantes designados emplearán entonces todas las técnicas de prevención de incendio aceptadas para eliminar y/o reducir el número y frecuencia de siniestros. Pero sobre todas las cosas, cualquier Programa de Seguridad para ser efectivo es esencial el mantenimiento y cooperación del personal administrativo demostrando un interés activo, así como la aceptación que muestren los supervisores, quienes en virtud del número y de la posición, seguramente podrán obtener resultados significativos en la reducción costosa de accidentes del personal y de los daños a la propiedad. En tal sentido, éstos últimos, los supervisores y capataces, son quienes asumirán la responsabilidad de la instrucción del personal a su cargo para que en sus operaciones diarias los mismos observen las prácticas de seguridad, así como exigir se aplique éstas recomendaciones, normas y reglamentos de seguridad al máximo de su autoridad y de su habilidad. Porque él, no es de extrañar, estará en una posición que le permitirá observar condiciones y operaciones que no son seguras directamente, y podrá actuar enérgicamente para eliminar cualquier peligro posible dentro de la actividad bajo su dirección o jurisdicción. Y por último, el resto del personal - la gente en su hogar, la calle, en cualquier lugar, será responsable de la comprensión y observación no solo de las normas y procedimientos, sino también, de las recomendaciones que se editen para contribuir a impedir que se lesionen ellos u otras personas, que se dañe el equipo o la propiedad y en definitiva, evitar las enormes pérdidas que se ocasionan anualmente por causa de infinidad de siniestros.
El Asesor en Prevención de Accidentes del Centro Avanzado de Capacitación y Entrenamiento para actuación ante emergencias, sitio www.inspectoralbornoz.com, dirigido por el Inspector de Policía - Bomberos (r) Reinaldo Albornoz propone hablar de incendios ahora, que estamos en invierno. En ese sentido Edgardo R. Menéndez, Teniente Coronel(Aviador) retirado de la Fuerza Aérea Uruguaya, Asesor del Centro Avanzado de Capacitación y Entrenamiento para actuación ante emergencias adelanta que "la Prevención de Accidentes en general, y en nuestro caso - los Incendios, -como dice un viejo adagio-, no por eso menos cierto: os accidentes (incendios) no suceden porque sí; son ocasionados". Se pueden evitar” Señala que “además de un ambiente seguro y libre de riesgos, la capacitación, el entrenamiento adecuado, y una supervisión cuidadosa del personal, son esenciales para que las operaciones y actividades sean libres de accidentes. O sea que los incendios que se pueden prevenir si afectan seriamente la capacidad de una empresa ya sea por medio de lesiones al personal y daños al equipos y el material, éstas líneas que en lo sucesivo intentaremos de compartir, servirá como una fuente conveniente de información práctica y como guía para todos en general en la prevención de incendios y en el manejo de equipo y materiales potencialmente peligrosos para diferentes operaciones y así eliminar las causas de los siniestros”. Todas las personas, especialmente los supervisores y capataces, podrán utilizar estos conceptos para planear, organizar y poner en funcionamiento los diferentes aspectos de un programa de seguridad y para ayudarse en la orientación de actividades para la prevención de incendios, adoctrinar a los hombres en la prescripción de prácticas de seguridad y en la prevención de los mismos. Las normas de seguridad y los fundamentos para la prevención que eventualmente se emitan, podrán utilizarse también, como requisitos mínimos para cubrir las condiciones promedio pertinentes a casi todas las actividades. Aunque está de más decir que no es factible cubrir todas las situaciones que pudieran presentarse, por consiguiente, se necesitará de la motivación y cooperación decidida, y los recursos e ingenio particular de cada uno o en forma colectiva de toda la gente para hacerle frente a las condiciones y actos no comprendidos en estos artículos. Además, quienes utilicen esta información deberá reforzar cualquier recomendación con la lectura y el apoyo a la implementación de leyes, normativas, reglamentos, manuales, directivas, fichas tácticas y otras publicaciones similares. Los folletos, libros y boletines publicados por otras empresas, agencias y organizaciones también serán útiles y deberán ser consultadas. En tal sentido, la persona de más alta jerarquía de una empresa será la responsable de la ejecución de los Programas de Seguridad. Sus representantes designados emplearán entonces todas las técnicas de prevención de incendio aceptadas para eliminar y/o reducir el número y frecuencia de siniestros. Pero sobre todas las cosas, cualquier Programa de Seguridad para ser efectivo es esencial el mantenimiento y cooperación del personal administrativo demostrando un interés activo, así como la aceptación que muestren los supervisores, quienes en virtud del número y de la posición, seguramente podrán obtener resultados significativos en la reducción costosa de accidentes del personal y de los daños a la propiedad. En tal sentido, éstos últimos, los supervisores y capataces, son quienes asumirán la responsabilidad de la instrucción del personal a su cargo para que en sus operaciones diarias los mismos observen las prácticas de seguridad, así como exigir se aplique éstas recomendaciones, normas y reglamentos de seguridad al máximo de su autoridad y de su habilidad. Porque él, no es de extrañar, estará en una posición que le permitirá observar condiciones y operaciones que no son seguras directamente, y podrá actuar enérgicamente para eliminar cualquier peligro posible dentro de la actividad bajo su dirección o jurisdicción. Y por último, el resto del personal - la gente en su hogar, la calle, en cualquier lugar, será responsable de la comprensión y observación no solo de las normas y procedimientos, sino también, de las recomendaciones que se editen para contribuir a impedir que se lesionen ellos u otras personas, que se dañe el equipo o la propiedad y en definitiva, evitar las enormes pérdidas que se ocasionan anualmente por causa de infinidad de siniestros.
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