La inseguridad parqueplatense cobró su primera víctima incruenta

PARQUE DEL PLATA (2953) Renunció hoy el Tesorero del Yacht Club Solís Chico, Luis Maria Merialdo Flogino, un viudo que teme dejar su casa sola en Parque del Plata porque ha sido saqueada varias veces. Merialdo se excusó por no poder cumplir más sus tareas como Tesorero de club de Solís Chico, importante institución, centro de gran movimiento turístico en todas las temporadas como la que se avecina. Dijo que a partir de ahora pasará la mayor parte de su día en su casa con un arma de fuego para protegerse. 

Merialdo presentó renuncia ante una sorprendida asamblea de socios reunida en la mañana, que nada sabía de la decisión que había adoptado su administrador. Merialdo es sólo un ejemplo del temor generalizado que se apoderó de los vecinos de Parque del Plata a menos de un mes del comienzo de la temporada de verano. La instructora principal del club Solís Chico es la hija del actual prefecto de Montevideo, y ex prefecto de Atlántida, el capitán de navío Luis Jaunsolo. 

Los comerciantes no saben aún que resultado obtendrán las movilizaciones espontáneas de vecinos que reclaman más seguridad (como el divulgado el viernes por la edición central de Subrayado –canal 10). Los comerciantes suponen que uno de los resultados –negativo- de las protestas vecinales podría ser que turistas indecisos, no vengan a Parque del Plata, al conocerse que hay 3 robos por día, en la jurisdicción de la seccional 24. 

En la jurisdicción policial que abarca los balnearios de Parque del Plata y Las Toscas (seccional 24 de la policia de Canelones) opera una banda delictiva con unos 40 miembros que se desplaza de Canelones a Maldonado donde ya cometió millonarios saqueos en domicilios. Los policías conocen a los miembros de la banda y conocen sus modus operandi, pero al parecer no llegan a tiempo para capturarlos y así ir reduciendo el poder delictivo de “la banda de Ali Baba”.

Los delincuentes que atemorizan a Parque del Plata son autores de la mayoría de los saqueos perpetrados en la zona, con herramientas apropiadas para arrancar rejas, vehículos para movilizar los objetos hurtados e integrantes entrenados para penetrar un domicilio y culminar un saqueo en menos de 20 minutos. Hay versiones que dicen que se trata de un grupo de personas hijos de una mujer que vive en un fondeadero de pesca de corvina, algunos de los cuales aún son menores y andan armados a vista de la policía, que son habitualmente insultados por estos “tatitos” sin poder detenerlos con posibilidades de que permanezcan más de 15 días fuera de circulación. 

Corren rumores de que esto se debe a que una alta jerarca de la Justicia de Atlántida “hace maravillas” para que los expedientes de los tatitos, no vayan al Juzgado Penal de la Ciudad de la Costa donde los mayores de la banda, serían condenados. Peor aún, se habla de una connivencia entre esta jerarca judicial y la abogada de los sospechosos, que en contubernio permitirían mantenerlos fuera de la esfera penal.